El próximo 6 de mayo será uno de los días más importantes de la historia de Inglaterra. Ese día será el acto de coronación como rey de Carlos III y de su esposa, Camilla. Los preparativos están en marcha para los grandes fastos que se celebrarán en honor al nuevo rey de Inglaterra. De a poco se van desvelando algunos detalles del gran día. Será la primera coronación que se celebre en Londres en 70 años, pues la última, la de Isabel II tuvo lugar en junio de 1953. 

Otro de los grandes detalles secretos es sobre la joya que lucirá Camila. Se ha indicado que en la solemne ceremonia religiosa la reina consorte ha decidido llevar una corona diferente a la de la anterior reina consorte, la Reina Madre. En definitiva, Camila portará la corona de la Reina María de Teck, bisabuela de su marido, cuando su marido Jorge V fue coronado en el año 1911.

La corona ya salió de la Torre de Londres para su preparación

Según la información brindada, la corona de la reina María de Teck es una joya que ya ha sido sacada de la Torre de Londres para ser sometida a algunos cambios. Desde el Palacio de Buckingham emitieron un comunicado sobre la joya: "La elección de la corona de la reina María por Su Majestad (refiriéndose a Camilla) supone la primera vez en la historia reciente que una corona ya existente sea usada para la coronación de una reina consorte en lugar de fabricar una nueva, en aras de la sostenibilidad y la eficiencia".

Además, desde la Corona británica, y por decisión de Carlos III y Camilla, están trabajando en unas modificaciones en la corona para hacer un homenaje a la reina Isabel II. Se trata de nuevas piezas de joyería que se sumarán a la corona. "La corona será renovada con los diamantes Cullinan III, IV y V, pertenecientes a la colección personal de la reina Isabel II y usados por la difunta monarca como broches durante muchos años”.

Es importante mencionar que estos nuevos diamantes que añadirán a la corona van a sustituir al controvertido diamante Koh-I-Noor de 105 quilates. Es un diamante que India, Pakistán y Afganistán han exigido al Reino Unido que se les devuelva. La joya está engastada en la corona que usó Isabel Bowes-Lyon, madre de Isabel II.