¿POSIBLES FRAUDES?

Ley Trans: oficinas del registro civil reciben 'avalancha' de hombres que piden cambiar de género

Muchas dependencias del registro civil en todo el país han asegurado que la demanda de hombres ha aumentado exponencialmente, por lo que sospechan de segundas intenciones de los interesados.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, porta la bandera que representa al colectivo trans.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, porta la bandera que representa al colectivo trans.Créditos: Libertad Digital
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El pasado 2 de marzo entró en vigor la La ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI, llamada comúnmente 'Ley trans' que permite a los españoles de más de 16 años poder cambiar su nombre y su género en el Registro Civil sin ningún requisito, más que su deseo expreso.

Una semana después, muchas dependencias del Registro Civil han asegurado que la demanda para cambiar de identidad ha crecido exponencialmente, sobre todo entre los hombres que constituyen prácticamente el 100% de los demandantes. Al respecto, los funcionarios están anonadados y sospechan de 'fraude' para aprovecharse de esta ley. Además, añaden que ninguno de los solicitantes ha preguntado sobre el cambio de nombre en el registro, ya que "solo lo hacen por la identidad de género".

"Desde el punto de vista del fraude, esta ley puede dar lugar a claros ejemplos, de hecho, es la impresión que nos ha dado en este tiempo con gran parte de los hombres que han venido a solicitar el cambio. Hasta que esta ley fue aprobada habíamos recibido solicitudes por parte de hombres y mujeres de una manera más o menos equilibrada. Lo de ahora es desorbitado", apunta uno de los trabajadores de un registro civil del sur de Madrid consultado por La Razón.

Siguiendo a este medio, la tendencia de una alta demanda para cambiar de sexo en el DNI también puede observarse en otros puntos de España. Por ejemplo, en el registro civil de A Coruña -en una semana- han recibido 40 peticiones para cambio de sexo (la mayoría de hombres). Por su lado, en la capital asturiana, las cuatro que han recibido han sido de varones.

Esa tendencia se suma al notorio dato de solicitudes en general para cambio de sexo. Así , por ejemplo, solo en Zaragoza han registrado 35 en siete días. Y en las capitales de provincia catalanas suman más de una veintena.

La ley establece un plazo de 4 meses en total para tener la nueva identidad de género.

Posibles fraudes con la Ley Trans

Frente a los fraudes de algunos malintencionados, lamentablemente esta ley no tiene escudos para poder detectarlos. Al respecto, la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha asegurado que sí existen mecanismos para detectar fraudes, pero la realidad de la aplicación de la Ley Trans es que es un procedimiento que no requiere más que la voluntad del solicitante.

Según la norma, a partir de los 16 años cualquier persona puede cambiar de nombre y de sexo en el registro, sin necesidad de presentar informes médicos ni psicológicos. El único requisito es la voluntad del interesado sin el permiso de nadie (ni tutor legal, ni autorización de los padres) mientras que aquellos entre los 14 y los 16 años deberán contar con el consentimiento de sus progenitores y los que deseen registrar este cambio entre los 12 y los 14 años deberán aportar un aval judicial.

También sse ha eliminado la necesidad de haber iniciado un tratamiento hormonal para cambiar de identidad de género de forma oficial. Hasta antes de la aprobación de esta ley, era obligatorio empezar a transformar el organismo antes que la documentación, por lo que -por ejemplo- una persona con aspecto físico totalmente masculino puede pedir legalmente ser considerado mujer.

Irene Montero asegura que no se puede hacer fraude con esta ley.

 Además, la nueva ley también recoge la posibilidad de que una persona trans pueda solicitar regresar a su género original de la misma manera que lo pidió. En el caso de que quisiera modificarlo por tercera vez, entonces tendría que pasar por un juez, quien dirimiría si hay visos de un fraude de ley.