El príncipe Harry y Meghan Markle nunca dejaron de lado Frogmore Cottage y la siguieron conservando; ya que fue un obsequio de boda de la difunta reina Isabel II. De hecho, esta residencia ha sido utilizada por la pareja de duques como base de operaciones en el Reino Unido, alojándose allí cada vez que volvieron al país en estos últimos años.
De todas maneras, Meghan Markle y el príncipe perderían la propiedad por decisión del rey Carlos III, pues no estaría muy contento con que su hijo menor y su nuera sigan siendo los dueños de esta propiedad. Según el diario "The Sun", la decisión ya está tomada y no se trata solo de rumores ya que desde el Palacio de Buckingham se emitió un aviso de desalojo.
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El príncipe Harry y su esposa ya están preparando todo para la mudanza. A pesar de que la casa fue un regalo de la difunta reina, la pareja no podrá quedarse con la propiedad divido que está en forma de préstamo a largo plazo por parte del palacio, como suele ser el caso en la mayoría de las residencias de propiedad real.
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La irrupción de Meghan Markle en la vida del príncipe ha detonado de una muy mala manera. Es por eso que este desalojo no es que fue algo sorpresivo para la pareja, pues la relaciones están rotas en lo protocolar y por eso se duda que estén en el mes de mayo para la coronación del rey Carlos III.
Para calmar las aguas, el príncipe Harry y su esposa han sido invitados a quedarse en un lugar ya conocido. El rey ofrecerá el antiguo apartamento de la princesa Diana a los duques como alojamiento temporal si acuden a su coronación, mientras el príncipe Harry y su esposa Meghan dudan si asistir o no en medio de las consecuencias de la vida en la familia real.