El verano está a la vuelta de la esquina y es el momento perfecto para preparar tu piel y lucir radiante durante la temporada más soleada del año. Con el aumento de la exposición al sol y el cambio de clima, es importante cuidar nuestra piel de manera adecuada. Aquí te presentamos algunos consejos infalibles para que tu piel luzca saludable y resplandeciente este verano.
Protégete del sol
El primer paso fundamental para preparar tu piel es utilizar protección solar. Aplica un protector solar de amplio espectro con un factor de protección (FPS) de al menos 30, incluso en días nublados. No olvides reaplicarlo cada dos horas y después de nadar o sudar. Esto te ayudará a proteger tu piel de los dañinos rayos ultravioleta, previniendo el envejecimiento prematuro y reduciendo el riesgo de cáncer de piel.
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Hidratación intensa
Durante el verano, nuestra piel tiende a deshidratarse debido al calor y la exposición al sol. Asegúrate de mantener una hidratación adecuada bebiendo suficiente agua y utilizando productos hidratantes específicos para tu tipo de piel. Opta por cremas y lociones ligeras que se absorban rápidamente y mantengan tu piel suave y flexible.
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Exfoliación regular
La exfoliación es clave para eliminar las células muertas de la piel y mantenerla fresca y rejuvenecida. Realiza una exfoliación suave una o dos veces por semana para deshacerte de las impurezas y permitir que los productos hidratantes penetren mejor en la piel. Utiliza exfoliantes suaves y evita frotar en exceso, especialmente si tienes la piel sensible.
Cuida tus labios
Muchas veces olvidamos que los labios también necesitan cuidados especiales. Durante el verano, es común que los labios se resequen y agrieten debido a la exposición al sol y al viento. Aplica un bálsamo labial con protección solar para evitar daños y mantener tus labios suaves e hidratados. También puedes exfoliarlos suavemente con un poco de azúcar y aceite de coco para eliminar la piel seca.
Alimentación equilibrada
No podemos olvidar que la salud de nuestra piel también depende de nuestra alimentación. Durante el verano, incluye en tu dieta alimentos ricos en antioxidantes como frutas y verduras frescas. Además, evita el exceso de alimentos procesados y bebidas azucaradas, ya que pueden contribuir a problemas de piel como el acné.