El escote, a menudo relegado en nuestra rutina de cuidado de la piel, merece una atención especial. Con demasiada frecuencia, olvidamos extender nuestras cremas faciales hacia el cuello y el escote, y ni siquiera consideramos productos específicos para esta área, como las mascarillas de escote. Después del verano, es común que aparezcan líneas finas, manchas y arrugas en esta zona debido a la prolongada exposición solar.

Para prevenir y reducir estos signos, los expertos recomiendan aplicar una mascarilla de escote una o dos veces por semana. Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Perricone MD, enfatiza la importancia de nutrir la piel con una buena mascarilla cuando se notan arrugas o hiperpigmentación. Tanto la piel del cuello como la del escote son más finas y producen menos colágeno que la piel facial, lo que las hace más propensas a la flacidez. 

The Barrier Bioactive Treatment de U Beauty: Inspirada en la medusa inmortal, actúa sobre los factores de crecimiento esenciales para promover la proliferación de nuevas células. Aunque es un tratamiento nocturno, también se puede usar como mascarilla, aplicándola durante 20 minutos y masajeando hasta su absorción total en rostro, cuello y escote.

Bio Enzymes Mask Anti-edad Escote de Talika: En tan solo 15 minutos, suaviza e ilumina el escote. La biocelulosa de la mascarilla contiene ácido hialurónico hidratante, vitamina B3 antimanchas y un complejo de 16 plantas antioxidantes y rejuvenecedoras.

Cryo-Flash Mask-Cream de Clarins: Esta mascarilla es capaz de bajar la temperatura de la piel hasta cuatro grados, lo que favorece la renovación celular. Extiéndela en rostro, cuello y escote para aprovechar sus beneficios durante la ola de calor estival.