La técnica del "eyeliner transparente" ha ganado popularidad en el mundo del maquillaje por sus efectos asombrosos y su apariencia fresca y luminosa. Contrariamente a lo que su nombre sugiere, el eyeliner transparente no es un producto translúcido en sí, sino más bien un truco que crea una ilusión óptica única y favorecedora. Uno de los principales beneficios de esta técnica es que permite estilizar y alargar la mirada.
Pasos para lograr un eyeliner transparente perfecto
Paso 1: Comienza por elegir un corrector líquido o en crema que sea significativamente más claro que tu tono de piel. También necesitarás una brocha biselada y fina para la aplicación. La clave es optar por un tono de corrector mucho más claro de lo habitual, ya que esto intensificará el efecto del eyeliner transparente.
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Paso 2: Antes de aplicar el corrector, asegúrate de preparar tus párpados con una prebase de ojos o una sombra neutra. Luego, con la brocha biselada, traza una línea delgada en dirección a la ceja desde el extremo de las pestañas inferiores. Después, dibuja una segunda línea desde el párpado superior hasta que ambas líneas se encuentren. Finaliza difuminando el espacio entre las dos líneas hacia el interior del ojo. El resultado será un triángulo entre las líneas, imitando la forma común del eyeliner, pero sin rellenar el espacio central.
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Paso 3: Una vez que hayas logrado el resultado deseado y el corrector esté bien asentado, fíjalo con polvos translúcidos. Estos polvos asegurarán que el maquillaje de ojos se mantenga intacto y no pierda intensidad a lo largo del día. Opta por polvos translúcidos sin color para evitar alterar el resultado final. Pueden ser polvos compactos o sueltos, según tu preferencia.
El eyeliner transparente es una técnica de maquillaje que crea un efecto de ojos más estilizados y alargados mediante un truco óptico. Siguiendo estos tres pasos sencillos, podrás lograr este look fresco y luminoso que es perfecto para el verano. No necesitas productos adicionales, solo un corrector claro y una brocha biselada.