Leo Messi es reconocido por un gran número de personas como uno de los futbolistas más destacados de la época actual, mientras que otros afirman que es el mejor jugador de todos los tiempos.
Aunque su habilidad y talento hacen que destaque en cualquier campo en el que juegue, sin importar el equipo, Messi le atribuye parte de su grandeza a sus rutinas de ejercicio y cuidado de la salud, que le ayudan a rendir al máximo y a mantenerse sano.
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A pesar de haber sido diagnosticado con deficiencia de la hormona del crecimiento durante su niñez, Messi desarrolló una velocidad y agilidad que son un desafío para muchos atletas que aspiran a igualar o superar su nivel.
Las claves de su habilidad se fundamentan en entrenar 3 pilares básicos
"El mejor jugador del mundo en este momento es Lionel Messi. Es más rápido con el balón que los defensores sin él", señala Vaig Friedman, director del equipo de rendimiento de la empresa Athletes Performance, especializada en rendimiento deportivo, en una entrevista con ESPN.
Friedman sostiene que Messi no necesita ser alto, ya que su rapidez y habilidad general con el balón se fundamentan en tres principios esenciales vinculados a su fuerza, estabilidad corporal y precisión.
"Primero debes ser explosivo y fuerte. Luego, debes tener suficiente estabilidad en tus tobillos, caderas y torso para poder transmitir esa fuerza eficientemente al suelo. Y finalmente, debes ser capaz de dirigir esa fuerza al suelo en la dirección correcta, y es ahí donde la técnica hace su parte", explica Friedman.