Las pensiones no contributivas son un tipo de ayuda económica destinada a individuos que, aunque reúnen las condiciones para retirarse o solicitar una pensión por invalidez, no califican para una prestación pública debido a que no han cumplido con el mínimo de cotizaciones requeridas por la Seguridad Social.

Este mecanismo busca asegurar un ingreso básico para aquellas personas que carecen de un historial laboral completo. La administración y financiación de estos subsidios están a cargo del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso), con el objetivo de proveer asistencia médica y satisfacer las necesidades elementales de los sectores más desfavorecidos.

El documento clave para no ver bajar el valor de tu pensión contributiva

El documento anual de ingresos juega un papel crucial en el cálculo de la pensión no contributiva. Si los ingresos adicionales al margen de la pensión aumentan, el importe de esta disminuirá, mientras que si dichos ingresos disminuyen, la cantidad de la pensión no contributiva podrá incrementarse.

Es vital cumplir con la presentación de la declaración anual de ingresos dentro del periodo estipulado, ya que su omisión conlleva la suspensión del pago de la pensión.

Además, es obligatorio que los pensionistas informen al Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS) sobre cualquier cambio de dirección, inicio de actividades laborales o variaciones en su situación económica o familiar dentro de los 30 días posteriores a su ocurrencia. Estas notificaciones deben realizarse a través de la Sede Electrónica de la Seguridad Social o en sus oficinas.

La falta de comunicación de estos cambios puede resultar en la suspensión de la prestación o la imposición de sanciones.

La Ley General de la Seguridad Social requiere que los receptores de la pensión de jubilación no contributiva entreguen, durante el primer trimestre del año, una declaración de ingresos o rentas de su hogar.

El formulario, proporcionado por la entidad gestora de estos subsidios, debe ser completado y devuelto antes del 31 de marzo. No cumplir con este requisito puede resultar en la suspensión del pago de la pensión, tal como indica el Imserso en su sitio web.