La temporada de la Declaración de la Renta de 2023 comienza en nada, y es probable que muchos se pregunten si existe algún gasto deducible que podrían estar pasando por alto. Esto es especialmente relevante para aquellos que trabajaron desde casa durante el último año y que pueden estar inciertos sobre las deducciones a las que tienen derecho.
Este interrogante se ha vuelto común entre varios trabajadores en España, especialmente después de que la pandemia hizo que el teletrabajo se convirtiera en una modalidad laboral permanente para muchos, el teletrabajo vino para quedarse.
Cómo desgravarte en la Declaración de la renta desde el teletrabajo
Si trabajas por cuenta ajena
Los empleados por cuenta ajena solo pueden incluir en sus deducciones elementos como las aportaciones a la Seguridad Social, contribuciones a mutualidades de funcionarios, pensiones, contribuciones a instituciones para huérfanos o similares, cuotas sindicales y de colegios profesionales, con un límite máximo de 500 euros al año, además de los costos legales en disputas laborales con la empresa, incluyendo casos de terminación de contrato, reclamaciones de salario o compensaciones.
Si trabajas como autónomo
Si eres propietario de tu vivienda y la has registrado bajo el régimen de autónomos, puedes aplicar deducciones en tu declaración del IRPF por varios gastos asociados a dicha propiedad. Entre estos, los más destacados incluyen los gastos de comunidad, los intereses hipotecarios, o el seguro de hogar:
- En el caso de que estés alquilando tu vivienda, es posible deducir una fracción del alquiler en tu declaración, siempre y cuando se especifique que el inmueble sirve tanto de vivienda como de espacio de trabajo.
- Asimismo, tienes la opción de deducir los costes de materiales necesarios para tu actividad económica, siempre presentando las facturas correspondientes.
- Igualmente, se pueden deducir los gastos asociados a suministros como internet, electricidad o teléfono, que son fundamentales para el desempeño de tu trabajo.