La suspensión de la búsqueda de seis trabajadores desaparecidos tras el choque del portacontenedores Dali contra el puente Francis Scott Key en Baltimore ha llevado a las autoridades a considerarlos fallecidos. El accidente subraya la vulnerabilidad del puente a impactos de grandes navíos y sus consecuencias para el puerto de Baltimore, aunque no se espera que afecte significativamente al comercio global. Este suceso ha evidenciado la necesidad de mejoras en seguridad e infraestructura para prevenir futuros incidentes.

El Dali, un portacontenedores de gran envergadura, impactó y causó el colapso del puente mientras seis trabajadores realizaban mantenimiento. La dificultad de la búsqueda y rescate se acrecienta por las complicadas condiciones del puerto, incluyendo corrientes fuertes y baja temperatura del agua, reduciendo las esperanzas de hallar supervivientes entre los desaparecidos.

Un aviso temprano evitó una catástrofe mayor en el puente de Baltimore

La rápida intervención de las autoridades, que detuvieron el tráfico hacia el puente de Baltimore tras el choque del portacontenedores Dali, fue clave para evitar una tragedia mayor, según el gobernador de Maryland, quien calificó a los implicados en la respuesta como héroes. Este accidente ocurrió en un momento de bajo tráfico, crucial para salvar vidas, especialmente considerando que el puente es transitado anualmente por 12 millones de vehículos.

Aunque inicialmente se temía por la existencia de más víctimas, las investigaciones actuales se centran en los seis trabajadores desaparecidos, cuyos vehículos fueron identificados en el fondo del puerto mediante sonar. La tragedia también incluyó el rescate de dos personas, una de las cuales sigue hospitalizada. Este incidente destaca por suceder en un momento de mínimo tráfico, lo que, unido a la rápida acción de los servicios de emergencia, minimizó las posibles pérdidas humanas.

El Dali, que navegaba hacia Singapur con 20.000 contenedores, sufrió una pérdida de propulsión mientras salía del puerto, según reportes de inteligencia estadounidense.

A pesar de los esfuerzos por alertar a las autoridades de Maryland sobre la pérdida de control y el riesgo de colisión, el buque terminó impactando el puente y causando su colapso total. Afortunadamente, no hubo heridos entre la tripulación del barco, destacando la eficacia de las medidas de seguridad y la preparación de los pilotos del puerto en la gestión del incidente.