La tarta de leche es uno de esos postres que nos transporta a la infancia con cada bocado. En esta ocasión, te presentamos una receta que ha sido transmitida de generación en generación, directamente de la abuela a nosotros. Con un sirope de leche condensada que le da un toque especial, esta tarta te hará sentir como si estuvieras en casa de la abuela con cada deliciosa porción.
Ingredientes:
- 2 tazas de harina de trigo.
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- 1 taza de azúcar.
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- 1 taza de leche entera.
- 1/2 taza de mantequilla derretida.
- 3 huevos.
- 1 cucharada de esencia de vainilla.
- 2 cucharaditas de polvo de hornear.
- 1/2 cucharadita de sal.
- Para el sirope: 1 lata de leche condensada.
Preparación de la masa
En un tazón grande, mezcla la harina, el azúcar, el polvo de hornear y la sal. En otro recipiente, bate los huevos y añade la leche, la mantequilla derretida y la esencia de vainilla. Luego, incorpora gradualmente esta mezcla húmeda a los ingredientes secos. Revuelve hasta obtener una masa homogénea.
El sirope de leche condensada
En una cacerola pequeña, calienta la leche condensada a fuego bajo hasta que se dore ligeramente y adquiera una textura de sirope. Esto tomará unos 10 minutos. Luego, retira del fuego y reserva.
Horneado
Vierte la mitad de la masa en un molde previamente engrasado y enharinado. Luego, rocía un poco de sirope de leche condensada sobre la masa. Agrega el resto de la masa y repite el proceso de sirope. Esto creará capas de sabor irresistibles.
Horno y enfriado
Precalienta tu horno a 180°C y hornea la tarta durante 30-35 minutos, o hasta que esté dorada y al insertar un palillo en el centro, este salga limpio. Una vez lista, retira la tarta del horno y déjala enfriar antes de servirla.
Esta esponjosa tarta de leche con sirope de leche condensada es un homenaje a las tradiciones culinarias de nuestras abuelas. Con su sabor dulce y reconfortante, te transportará a esos momentos especiales en la casa de la abuela, donde el amor y la cocina se entrelazaban de manera mágica.