La leche es uno de los elementos infaltables en la cocina. Sus múltiples nutrientes la hacen parte importante lo hacen un elemento indispensable en la alimentación de muchas personas, en especial de los niños. Lo que pocos saben es también se podrá usar como elemento para el cuidado de la piel. Para ser más precisos para blanquearla.
En el Antiguo Egipto se usaba este elemento natural para blanquear la piel. Lo que se hacían eran baños con miel, eso sí, no cualquiera tenía a acceso a ellos. Eran personalidades como Cleopatra las que recurrían a esta clase de elixir para el cuidado de la piel. Mejor vamos a conocer sus beneficios.
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Beneficios colocar leche en la piel
Hidratación profunda: La leche es una fuente rica en proteína, vitaminas e ideal para hidratar, suavizar e iluminar el cutis.
Exfoliación: Este producto de origen animal sirve como alfahidroxiácido que remueve las células muertas. Un paso fundamental para que la piel brille más.
Reduce manchas: Es un excelente producto para reducir pigmentación y darle un tono más uniforme a la piel.
Combate el acné: La leche, cuando proviene de vaca, cuenta con antiinflamatorios que ayudan a reducir el brote de granos en la cara y cuerpo.
¿Cómo usar la leche como blanqueador de piel?
Una de las opciones es realizar un baño de leche. Este truco de belleza necesitará que llenes la bañera con agua tibia. Posteriormente se debe agregar 2 o 3 tazas de leche entera. Una vez incluida la leche será momento de mover para que se esparza el producto por toda la zona. Ahora es momento darse un baño que dure entre 20 y 30 minutos.
Mascarilla de leche y miel: Para este remedio natural se deben mezclar 2 cucharadas de leche en polvo con una miel. Se debe mezclar hasta formar una pasta. Cuando esté la pasta se aplicará en el rostro. Se debe dejar actuar durante 20 minutos. Pasado el tiempo se debe enjuagar con agua tibia y secar con cuidado. Se recomienda usar 2 veces por semana.
Se debe recordar que la gente que decida usar esta clase de producto debe preguntarle primero a un experto. Cuando se trata del cuidado de la piel no todos los productos son buenos para cualquier persona. Mejor prevenir una posible alergia.