No hay dudas que la lavadora es uno de los electrodomésticos más cómodos de la era moderna ya que si no fuera por ella, sería muy duro y complicado lavar y escurrir las sábanas, las chaquetas y toda la ropa en general. De hecho, cuando se estropea es cuando nos damos cuenta de cuán útil es y del esfuerzo que hacían abuelas y bisabuelas.

Para que la ropa de blanco o la que utilizamos nosotros en el diario queden perfectas, siempre conviene tener a punto y en buen estado este electrodoméstico, que puede coger suciedad y humedad que luego manche nuestra colada. Sí, has leído bien. Tu lavadora puede hacer el proceso inverso y terminar ensuciando más las prensas si no tiene un buen mantenimiento.

¿Cómo dejar la lavadora como nueva?

En la lavadora siempre se carga de ropa sucia y con malos olores y eso acaba influyendo en la limpieza del electrodoméstico. Por lo tanto, si descuidamos su cuidado, a la larga podemos encontrarnos con moho y otras suciedades. El moho, además, provoca el pececillo de plata, un bicho de la humedad que, a su vez, trae consigo más problemas.

Es por eso que para que la ropa quede como nueva, debes saber utilizar el botón de desague. Esta parte del artefacto es especialmente útil si necesitas detener la lavadora en medio de un ciclo, por ejemplo, si te das cuenta de que has puesto demasiada ropa o si necesitas hacer alguna otra cosa en medio del ciclo. 

Además, el botón de desagüe también es útil cuando necesitas limpiar la lavadora. Puedes usarlo para drenar el agua sucia y, a continuación, limpiar el interior de la lavadora sin que haya agua en su interior. Este paso te permitirá tener la lavadora limpia y que la ropa te quede como recién comprada.