Las fresas son una deliciosa fruta que muchas personas disfrutan en postres, batidos y en su forma natural. Sin embargo, debido a los altos niveles de pesticidas y microorganismos dañinos que pueden contener, es importante lavarlas adecuadamente antes de consumirlas. La manera correcta de desinfectar las fresas es crucial para asegurarte de que estén libres de residuos químicos y bacterias que podrían comprometer tu salud y la de tu familia.
Antes de manipular las fresas, es importante lavar bien tus manos para evitar la transferencia de bacterias a los alimentos o a la superficie de la cocina. Además, cuando dejes de manipular las fresas, asegúrate de limpiar y desinfectar tus manos para evitar que queden microorganismos en tu piel.
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Aunque es importante lavar las fresas antes de consumirlas, desinfectarlas para luego guardarlas en el refrigerador puede resultar contraproducente. Para conservar frescas estas frutas por mucho más tiempo, es mejor almacenarlas en su empaque original y desinfectarlas hasta que vayan a ser consumidas. De esta manera, su sabor se mantendrá fresco y no se dañarán tan fácil.
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Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades recomiendan lavar las fresas con agua corriente y no con detergentes o lejía, ya que estos pueden dejar residuos químicos sobre las fresas, incluso más de los que se habían eliminado. Una buena opción para desinfectar las fresas es limpiarlas con vinagre. Para esto, mezcla 3 tazas de vinagre y 1 taza de agua en un tazón, deja remojar por 5 minutos y luego enjuaga muy bien con agua fría. Asegúrate de secarlas bien antes de almacenarlas.
Otra forma efectiva de desinfectar las fresas es utilizar bicarbonato de sodio. Un estudio ha encontrado que el bicarbonato de sodio es más efectivo para eliminar pesticidas que la lejía o el agua de grifo. Para utilizar el bicarbonato de sodio como desinfectante, enjuaga bien las fresas en un colador y frótalas suavemente con las manos mientras el agua corre. Luego, sumérgelas en un recipiente con dos tazas de agua y una cucharadita de bicarbonato de sodio durante 5 minutos. Finalmente, enjuaga bien y seca antes de almacenar.