Cultivar un jardín en el hogar no solo es una forma de añadir belleza y armonía al entorno, sino que también ofrece beneficios concretos tanto para el ambiente como para nuestra salud. Las plantas desempeñan un papel fundamental en la purificación del aire, aumentando la oxigenación y promoviendo la biodiversidad en el entorno.

Sin embargo, para mantenerlas saludables y vibrantes, es crucial proporcionarles los nutrientes esenciales que necesitan. Los abonos juegan un papel crucial en este aspecto, y los abonos caseros se destacan como una opción ecológica y económica para nutrir nuestras plantas sin gastar dinero extra.

En este contexto, las lentejas, un ingrediente de cocina común, pueden convertirse en un abono natural altamente beneficioso para tus plantas de jardín. Este abono de lentejas es rico en nitrógeno y otros nutrientes esenciales para el crecimiento de las plantas. Una ventaja significativa de usar lentejas como abono es su capacidad para liberar gradualmente estos nutrientes, lo que brinda un suministro constante a lo largo del tiempo y evita la sobrealimentación de tus plantas.

La preparación de este abono casero es sencilla. Solo necesitas lentejas secas, agua y un recipiente grande. Enjuaga las lentejas bajo agua fría para eliminar cualquier suciedad y luego colócalas en el recipiente, cubriéndolas con agua. Deja que las lentejas se remojen durante aproximadamente 24 horas. Después de este período, escurre las lentejas y conserva el agua que ha absorbido los valiosos nutrientes.

La aplicación de este abono de lentejas es igualmente fácil. Puedes utilizar el agua de lentejas en el riego del sustrato de tus plantas de jardín. Los jardineros recomiendan hacerlo cuando el sol se oculte, aproximadamente una vez por semana. Este proceso proporcionará gradualmente los nutrientes esenciales que tus plantas necesitan para un crecimiento saludable y estimulará su desarrollo vigoroso.