Muchas veces en la infancia y en la adolescencia pensamos en las profesiones que queremos tener cuando seamos grandes. Sin embargo, más allá de las clásicas como docente, policía, jugador de fútbol, médico, abogado, también hay otras menos comunes, más exóticas, pero no por eso menos deseadas.

Adecco, la empresa líder en el mundo en consultoría en Recursos Humanos identificó algunas profesiones exóticas como la de probar colchones, investigar olores, manejar la seguridad de los tiburones o una muy deseada que es controlar la calidad de los helados. Si bien son inusuales, existen y abarcan una amplia gama de industrias porque hay necesidades de este tipo dentro del mercado laboral.

Una de las profesiones exóticas es la de diseñador de parques temáticos. En este caso deben diseñar parques de diversiones y atracciones con mundos imaginarios para el disfrute de la gente. Otra muy elegida es el tester de colchones. Este si que es un trabajo soñado porque las personas tienen que probar colchones para evaluar su comodidad. Esto le sirve a los fabricantes para ayudar a mejorar sus productos que salen al mercado.

También en el listado de profesiones aparecen los investigadores de olores, conocidos como científicos sensoriales o especialistas en olfato. Algunas empresas los emplean para evaluar el olor de sus productos y garantizarse que sean agradables. para esto emplean técnicas de análisis químicos, pruebas sensoriales y tecnológicas.

Otra de las profesiones es la del limpiador de esculturas artísticas que se encargan de mantenerlas en los museos y espacios públicos. Además, otro trabajo remunerado es el del fabricante de pelucas, que se dedica a adquirir los materiales hasta el diseño, fabricación y distribución de las pelucas. Una de las más buscadas es la de controlador de la calidad del helado para asegurar su sabor y textura. Por último, una más arriesgada es la de los expertos en seguridad de tiburones que se encargan de protegerlos y de mantener un entorno seguro para todos.