Hay algunas ciudades donde trasladarse en bicicleta eléctrica de alquiler municipal puede costar más de 200 euros al año, es decir 13 veces más cargo que en Bilbao, según un estudio de la OCU. Las ciudades más caras para rentar son Madrid, San Sebastián, Valladolid y Barcelona. Para tener una idea, alquilar una bici de uso frecuente cuesta al año 275 euros en Madrid con Bicimad, 271 euros en San Sebastián con DBizi y 265 euros en Valladolid con Biki. En Barcelona el costo es de 232 euros anuales con Bicing.

Hay otras capitales de provincia donde hay costes debajo de los 20 euros como León con 12 euros al año, Burgos 15 euros y Santander 20 euros. Hay que aclarar que ese es el precio de bicicletas sin motor. 

La OCU en su informe también muestra que en lugares como en Málaga y Oviedo no hay un servicio público para alquilar bicicletas para los residentes o turistas. La única opción que tienen en ese caso es el alquiler de un servicio privado cuyo valor es de más de dos mil euros al año para los que hacen un uso frecuente.

Entre los problemas de este servicio de alquiler de bicicletas es que no hay un seguro de responsabilidad civil que cubra daños a terceros o al propio vehículo. Por eso la OCU recomienda contratar un antes de alquilar o preguntar si tienen. Esto especialmente para los que regularmente andan en bici.

También el estudio de tarifas abarca el alquiler de otros medios de transportes poco contaminantes al estilo de la bicicleta como el patinete y la moto eléctrica. Rara vez el alquiler baja de los 800 euros anuales para un patinete y de los 1.400 para una moto. Las tarifas varían mucho según las empresas de una misma ciudad. Para tener un ejemplo, el alquiler de un patinete eléctrico en Madrid varía entre 3,49 euros diarios con Dott y 16,50 con Lime.