La defensa del futbolista brasileño Dani Alves, acusado de agresión sexual, suavizó la acusación en su contra con el justificante de estado de embriaguez en caso de que sea condenado. Durante la segunda jornada del juicio contra el futbolista, declaró la mujer del brasileño, Joana Sanz, que confirmó la versión de que el acusado iba borracho la noche en la que supuestamente violó a una joven en la discoteca Sutton de Barcelona.

La también modelo relató que la madrugada del 31 de diciembre de 2022 Dani Alves entró a la habitación de su casa en la ciudad condal, se “chocó” con un armario, una mesita y “se desplomó en la cama”.

Sanz, que no se ha divorciado del futbolista, aunque en un primer momento, tras el estallido del caso, dijo que su intención era separarse, apoyó la tesis de la defensa de su todavía marido, que pretende demostrar que el acusado iba ebrio en el momento de los hechos.

Un total de cinco testimonios aseguran que el ex lateral del Barça, Juventus, PSG y Sevilla había bebido en abundancia aquella noche, y en contrario a esos testimonios, comparecieron los agentes de los Mossos que realizaron las diligencias y atendieron a la víctima, que afianzaron la versión de que fue violad por Dani Alves.

Cambio de testimonio: el amigo de Dani Alves

El amigo de Dani Alves, Bruno, que estaba con él la noche en que se produjo la supuesta violación cambió este martes la versión respecto a la que dio durante la instrucción. Antes había dicho que en la discoteca el futbolista se había tomado media copa de champán. Este martes, aseguró que Alves se tomó cuatro copas. Además, antes de ir a la discoteca, el futbolista había comido con unos amigos y luego fueron a otro local: habían pedido cuatro botellas de vino, una de whisky y gintonics. Bruno Brasil condujo el coche con el que se desplazaron a la discoteca porque consideró que Alves iba bastante bebido. Al salir del local, también cogió el coche y llevó al lateral a su casa.

El juicio a Dani Alves continuó la jornada de este martes con las declaraciones de 22 testigos. Entre ellos Sanz, el director de la discoteca Sutton y los agentes de los Mossos d’Esquadra. El interrogatorio del futbolista tendrá lugar este miércoles después de que su abogada, Inés Guardiola, solicitó que se aplazara su declaración al final del juicio.